En un anterior post hablamos del equipo que participaba durante el rodaje de una película. Pero el trabajo no termina aquí, tras el rodaje comienza la fase de montaje y posproducción, aunque algunas de las tareas de posproducción pueden llegar a solaparse con el rodaje.

En la posproducción de una película trabajará el siguiente equipo:

• Técnicos de laboratorio: Son los encargados del procesado de la película para obtener el soporte definitivo que pasará al montaje.
• Montador: Es la persona encargada de ordenar los planos, que fueron grabados “desordeandos”, para componer las escenas y secuencias, siguiendo el guión y las indicaciones del director.  Sin restar importancia al resto del equipo de posproducción, el montaje es una de las fases más importantes para el resultado final de la película.  El equipo de montaje se completa con un ayudante o Auxiliar de montaje.
• Director de fotografía: Que en esa fase realizará un etalonaje, proceso por el cual se ajustarán los niveles y densidades cromáticas, así como la iluminación, para evitar que haya saltos en la continuidad de luz. Esto también podrá ser realizado por un técnico especializado, el etalonador.
• Equipo de efectos visuales: Se encargará de crear las ilusiones ópticas o efectos que complementaran las escenas. Estos efectos visuales pueden ser desde pequeños detalles hasta crear y manipular imágenes enteras, para conseguir escenas cuyo rodaje sería costoso o imposible de realizar.
• Equipo de sonido:Compuesto por diferentes profesionales que se encargarán de los efectos especiales de sonido,  del doblaje de algunos diálogos que no quedaron bien en el rodaje en vivo, la integración de la música, etc… Dentro de este equipo encontraremos al editor de sonido que será el encargado de seleccionar y montar la grabación de sonido realizadas en directo e incluir los efectos sonoros. Finalmente el Ingeniero de Sonido mezclará las diferentes pistas para obtener la sonorización definitiva de la película.  El proceso de sonorización es otra parte fundamental, ya que ayuda a que la historia traspase la pantalla y llegue al espectador.

Suele ser habitual que durante esta fase de la posproducción participen el director, el productor y el director de producción, que serán los que den el visto bueno en cada una de las etapas y al montaje final de la película.